Para
llevar a cabo el proyecto, comenzamos realizando la detección de
conocimientos previos , el registro de lo que queríamos saber y ,
posteriormente, la observación directa. Después de unos días
lluviosos, decidimos salir al patio a coger caracoles, comenzamos con
8, pero la familia de caracoles luneros fue creciendo con algunos
que se encontraron en el patio y con otros que iban llegando de casa.
Una
vez que tuvimos 19, decidimos personalizarlos. Cada lunero/-a se
convertiría en el padre/madre de un caracol y , por tanto, se hacía
responsable de su cuidado. Cada caracol fue “bautizado” por su
padre/madre:
- Raquel – Ainize
- Arturo – Gari
- Sofía – Samira
- Daniel – Roki
- Abelardo – Narci
- Aitana – Marina
- Julia – Corazón
- Andrea – Corazón de melón
- Gonzalo – Estrella
- Irene – Cuerni
- Rocío – Cielo
- Iker – Estrellitas
- Ángela – Elia
- Nora – Corazón-Estrella
- Lionel – Manuelito
- Adrián – Doni XL el cañero
- Alma – Enrique
- Antonio – Superman Junior
- Gabriel -
Observando
bien a nuestros caracoles, nos dimos cuenta de que había alguno con
el caparazón roto. Al día siguiente, un lunero llegó al cole con
cáscara de huevo y nos dijo que se había acordado en su casa y
había investigado con su madre. Para regenerar los caparazones, los
caracoles tienen que tomar calcio. Para ello, pueden tomar el calcio
que se les da a las tortugas o conseguirlo de la cáscara de huevo,
machacada y mojada.
También
nos dijo que se había acordado de algunas de las preguntas que
habíamos anotado que
queríamos saber y nos traía información. Algunos de los datos que
nos dió fueron:
- El caparazón está hecho de calcio.
- Cuanto más grande es el caparazón más viejo es el caracol.
- Es hermafrodita, o sea es chico y chica a la vez.
- Recorre de 1,5 cm a 2 cm por segundo.
- Tiene 4 tentáculos, los más largos tienen en la punta los ojos.
- Las partes externas del caracol son: pie, caparazón, tentáculos.
- Usan la baba para moverse.
- Nacen de huevos.
Pudimos
comprobar que el tema despertaba el interés de
l@s
niñ@s. La
lista de preguntas en nuestro : ¿Qué
queremos saber? , seguía
aumentando.
Como nos había traído comida para los caracoles, la colocamos en la bandeja, a la que también pusimos un poco de tierra húmeda. Una de nuestras primeras observaciones consistiría en ver qué comida les gustaba más de todo lo que había traído:
lechuga, pepino, fresas, zanahorias, cherries.
Como
tener a todos los caracoles en una única bandeja era motivo de
discusión, puesto que todos querían verlo bien de cerca, decidimos
crear “casas de caracoles” por equipos. Y para identificar a los
caracoles de cada uno, les pintamos con rotuladores que no se
borraban , tan fácilmente, como los anteriores.
Gracias
a la observación, hemos ido dando respuesta a algunas de nuestras
dudas. Julia y Andrea vinieron a avisarnos de que ya sabían por
dónde hacían caca los caracoles. Caca que Adrián decidió limpiar.
También nos enseñaron otro día Julia y Andrea que sus caracoles habían comido Cherries y las cacas que habían hecho eran rojizas. Una pena que no tenemos una buena foto.
Al
principio teníamos a los caracoles en bandejas cubiertas de unos
plásticos a los que habíamos hecho agujeros, pero como había mucha
condensación,decidimos cubrirlas con redes para que tuvieran mejor
ventilación. Además, añadimos
el salvado
como alimento. (Aún no tenemos foto)
Como ya os hemos dicho, cada equipo tiene su bandeja y cada miembro su caracol. Hay algunos que están adoptados por todo el equipo.
También le hemos regalado a nuestros compañer@s de 2 años una bandeja con caracoles y , de vez en cuando, vienen a ver los nuestros.
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