Un buen día, a Finita, tutora de uno de los grupos de niñ@s de 3 años se le ocurrió que estaría bien hacer chorizos en cole, para que así los niños vieran su proceso de elaboración. La idea estaba bien, pero claro , hacía falta una "maquina de hacer chorizos" para picar la carne y embuchar. Tuvimos la suerte de que Adrián, uno de sus alumnos, podía traer una , que era nada menos que de su "bisabuela" si no recuerdo mal, y no sólo trajo la maquina , sino que además lo acompañó con la receta familiar. Una vez solucionado el problema de la máquina, había que ir a la carnicería y comprar todo lo necesario (que podréis ver en las fotos): ajos, pimentón, pimientos choriceros, sal gorda, pimienta negra, carne de cerdo, tripas ...
Como de lo que se trataba era de que los niños vieran el proceso lo que hicimos fue comprar una parte de picadillo ya hecho, y solamente un pedazo de carne sin picar.
Lo primero que había que hacer era dejar todo bien preparado, limpio, para poder empezar: utensilios limpios, manos limpias, delantal, gorro, guantes, trapo al estilo Arguiñano... Una vez que Finita estuvo preparada, comenzamos por explicar la utilidad de la máquina, los ingredientes necesarios,...., picó la carne, echó pimienta, la mezcló con el picadillo que se había comprado en la carnicería y se ligó todo ello en un bol con el "unto ya preparado" ,que también habían dado en la carnicería. Ahora tocaba dejar reposar la "mezcla".
Reposada ya ésta,volvimos a la cocina a embuchar. Al principio parecía difícil colocar las tripas en la máquina, pero enseguida le cogió el truquillo, así que manos a la obra. En este paso ya participaron los niños dando a la manivela, y no veais cómo les gustaba. Vicente explicó cómo había que ir tirando de las tripas para que no entrara aire. Ahora sólo había que ir embuchando y atando según quisiéramos que fuesen los choricillos. Una vez listos los chorizos, había que dejarlos curar, y para ello, los dejamos colgados, pero su curación iba a ser corta, porque estaba previsto que "los niños los devoraran", y una semana después así fue. Aunque aún no tenemos fotos de ello, podemos aseguraros que tenían una pinta buenísima y que los niños pedían repetir. En este caso, Ismael (musulmán) comió un bombón Ferrero, que también le supo muy rico.
http://www.skyalbum.com/showAlbum/159918
Como de lo que se trataba era de que los niños vieran el proceso lo que hicimos fue comprar una parte de picadillo ya hecho, y solamente un pedazo de carne sin picar.
Lo primero que había que hacer era dejar todo bien preparado, limpio, para poder empezar: utensilios limpios, manos limpias, delantal, gorro, guantes, trapo al estilo Arguiñano... Una vez que Finita estuvo preparada, comenzamos por explicar la utilidad de la máquina, los ingredientes necesarios,...., picó la carne, echó pimienta, la mezcló con el picadillo que se había comprado en la carnicería y se ligó todo ello en un bol con el "unto ya preparado" ,que también habían dado en la carnicería. Ahora tocaba dejar reposar la "mezcla".
Reposada ya ésta,volvimos a la cocina a embuchar. Al principio parecía difícil colocar las tripas en la máquina, pero enseguida le cogió el truquillo, así que manos a la obra. En este paso ya participaron los niños dando a la manivela, y no veais cómo les gustaba. Vicente explicó cómo había que ir tirando de las tripas para que no entrara aire. Ahora sólo había que ir embuchando y atando según quisiéramos que fuesen los choricillos. Una vez listos los chorizos, había que dejarlos curar, y para ello, los dejamos colgados, pero su curación iba a ser corta, porque estaba previsto que "los niños los devoraran", y una semana después así fue. Aunque aún no tenemos fotos de ello, podemos aseguraros que tenían una pinta buenísima y que los niños pedían repetir. En este caso, Ismael (musulmán) comió un bombón Ferrero, que también le supo muy rico.
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(Pincha y verás las fotos a mayor escala)
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