Las mañanas se nos pasan volando y las semanas aún más rápido. No hemos publicado en estos días, no porque no tengamos cosas qué contaros, pero es que..., algunas se pueden y otras no, forman parte de nuestro secreto de aula que podréis ir descubriendo según vaya avanzando el curso.
Lo que sí podemos contaros es que estamos trabajando muuuucho las normas y , poco a poco, las vamos interiorizando. Así, el día a día se nos hace más fácil y divertido.
Como muestra os dejamos una foto que refleja el cumplimiento de una de nuestras normas de juego. Con ella, también practicamos la atención, clasificación...
En la zona del juego simbólico tenemos muchísimas cosas de distinto tipo. Podemos jugar con todas pero, a la hora de recoger, no vale con guardarlas todas amontonadas. Hay que clasificarlas y poner cada cosa en su lugar. Para ello, tenemos unas cajas con etiquetas que nos ayudan: cacharritos, comidas, disfraces, ropas de muñecos, utensilios de médico y peluquera... Si hay desorden, tiramos todo al suelo y...manos a la obra, a clasificar. Lo mismo ocurre en el resto de zonas de la clase. Por cierto, poco a poco, lo vamos haciendo MUY BIEN.
La lluvia ha hecho que disfrutemos menos del aire libre y más del aula. De momento, hay dos zonas que triunfan. Estas son las que tienen que ver con el juego simbólico y con la zona de alfombra.
En el rincón del juego simbólico podemos disfrutar de: una buena comida casera, peluquería, supermercado, consulta médica, extinción de incendios, tareas del hogar... cada día va apareciendo algo nuevo.
En la zona de la alfombra, triunfan las construcciones de todo tipo, incluyendo también a los animales, a los que construyen casas. De esta zona ya os enseñaremos fotos. A veces, no tenemos fotos de todo.
En algún momento, el patio también se ha convertido en zona de disfrute.
Muchos días cuando llega la hora de marchar a casa se oyen voces que dicen: "-¿Ya?" y otras ,como la de Naia, que tienen una explicación que a tod@ maestr@ gusta escuchar. "Lo que pasa es que nos lo hemos pasado muy bien y el tiempo se nos ha pasado rápido".
¿Quién no vuelve al día siguiente cargado de energía después de escuchar eso?
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