Hace unos días os decíamos que nuestra oruga se había metido en la boca de Luna y que espérabamos que ésta hiciese de capullo, pero no fue así. Luna tiene la boca grande pero..., claro, nuestra oruguilla había comido demasiado y creció y creció tanto que tuvo que fabricarse su propio capullo. El viernes, Luna e Inés, nos avisaron de que algo especial iba a ocurrir en clase y... no os lo vais a creer, pudimos ver el nacimiento de una gran mariposa de colores rojo, verde, amarillo y azul. Nos encantó esta experiencia, nos pusimos muy contentos e incluso pudimos tocarla. La mariposa voló a unos de nuestros rincones primaverales y en cuanto nos despistamos y dejamos la ventana abierta se escapó a disfrutar del soleado día. 
Y para festejar el nacimiento de la mariposa, decidimos que nuestro tentempié tuviera forma de oruga, así que hicimos brochetas con manzana, mandarina y uva.
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